Decretada como símbolo nacional en el año 1988.
Las carretas, como resultado del auge económico en el Valle Central durante el siglo XIX, se convirtieron en el símbolo del transporte del café, esencial para la subsistencia de los agricultores, desde el interior del país hacia los puertos comerciales.
Decoradas o pintadas, se han convertido en un símbolo distintivo de Costa Rica a nivel global y han impulsado la creación y producción de artesanías.
Fue declarada por la UNESCO, como Patrimonio Intangible de la Humanidad.