Maestría Profesional en Derechos Humanos

El tema de los Derechos Humanos encuentra antecedentes desde, el punto de vista filosófico en las diversas doctrinas sobre el Derecho Natural y en el plano estatal en Inglaterra la Carta Magna de 1215, la Petición de Derechos de 1628, el Acta de Habeas Corpus de 1679 y la Carta de Derechos de 1689. Igualmente en la Constitución de Virginia de 1776 y la Declaración de Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789.

Durante el siglo XIX y principios del XX tuvo un desarrollo el derecho de protección de las minorías y el derecho humanitario de guerra y con la creación de la Sociedad de las Naciones el Derecho Internacional del Trabajo. Sin embargo, no fue sino hasta que como consecuencia de los horrores producidos por la nacionalsocialismo, se creó conciencia sobre la necesidad de proclamación universal de los derechos del ser humano, lo que se llega a dar con la Declaración Americana de Derechos y Deberes del Hombre de 1948 y la Declaración Universal de Derechos del Hombre de 1948. Debido a las discusiones sobre el carácter vinculante de dichas declaraciones se consideró que era necesaria la aprobación de tratados internacionales sobre Derechos Humanos, llegándose en Europa en 1950 a la aprobación del Convenio Europeo para la protección de los derechos humanos.

En el marco de la ONU se aprobaron en 1966 el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales. En 1969 en el marco interamericano se aprobó la Convención Americana sobre Derechos Humanos, que entró en vigencia diez años después. Igualmente en el ámbito regional hay que destacar la Convención Africana de Derechos de 1981. Igualmente se han aprobado múltiples convenciones sobre Derechos Humanos sobre temas específicos.

En los últimos tiempos han tomado gran importancia convenciones sobre grupos específicos de seres humanos, por ejemplo la convención de Derechos del Niño, la que incluso ha llegado a ser ratificada por la totalidad de los países del mundo con excepción de dos de ellos. Importante es que el Derecho Internacional de los Derechos Humanos se trata de un Derecho en continua evolución, de modo que el listado de derechos nunca puede ser considerado como cerrado, permitiéndose una ampliación del mismo, provocada por el mismo cambio tecnológico.
Últimamente han tomado gran auge derechos humanos de la tercera generación, tales como el medio ambiente y discusiones sobre la protección de derechos de la primera generación frente a nuevas formas de amenazas, por ejemplo frente a violaciones a la intimidad a través del uso de los medios informáticos, o a violaciones a la dignidad humana como consecuencia de la ingeniería genética.

Además se ha tendido a la necesidad de garantizar el juzgamiento por Tribunales Internacionales de violaciones a los derechos o bien de Tribunales Nacionales con base en el principio de justicia penal universal, fundamentalmente en supuestos de utilización de la tortura, caso extremo de violación del principio de dignidad de la persona humana.

Igualmente el Derecho Internacional del Trabajo presenta nuevos dilemas frente a los cambios producidos por la globalización. Por otro lado, no se puede desconocer que desde el punto de vista filosófico, el tema de los derechos humanos es uno de los que ocupa mayor interés, basta al respecto considerar las obras de Habermas, Luhmann, Rawls, Dworkin, etc. El tema de los derechos humanos tiene especial importancia en Costa Rica por encontrarse en ésta la sede de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, el Instituto Interamericano de Derechos Humanos y el ILANUD. El derecho del particular de presentar reclamos ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos hace que el estudio del Derecho Internacional de los Derechos Humanos adquiera una gran importancia como forma de protección de estos. Aunque la Corte Interamericana de Derechos Humanos no ha alcanzado a la fecha la relevancia que a nivel europeo tiene la Corte Europea de Derechos Humanos, en los últimos años ello ha empezado a cambiar.

Además no puede desconocerse que existe un proceso de reconocimiento de los derechos humanos a nivel estatal, en derechos fundamentales. Ello adquiere importancia sobre todo debido a la existencia de la Sala Constitucional en Costa Rica, ante la cual se pueden presentar recursos de inconstitucionalidad, hábeas corpus y de amparo por violación de los derechos fundamentales. Incluso la Sala Constitucional ha dicho que los tratados de Derechos Humanos tienen un rango superior a la misma Constitucional cuando establecen derechos superiores a ésta.

Todo ello hace que el Derecho Internacional de los Derechos Humanos adquiera una gran importancia dentro de la práctica jurídica costarricense. Consideraciones similares pueden hacerse con respecto a otros países centroamericanos con respecto a los cuales se llegue a extender el programa de maestría. Debe mencionarse también que Latinoamérica tiene un pasado, e incluso un presente, plagado de violaciones de los derechos humanos más elementales, lo que hace necesaria la formación de profesionales que contribuyan a hacerlos efectivos.

Todo ello hace que sea necesario un programa de maestría, que llene necesidades de conocimiento que no se pueden cumplir actualmente a través de los programas de maestría de las universidades estatales costarricenses y que pueda proyectarse además a nivel centroamericano.

El programa está dirigido a profesionales críticos, comprometidos con la defensa de los derechos. Se pretende que al finalizar el programa el estudiante sea capaz de presentar casos de violación de los derechos humanos ante la jurisdicción internacional y nacional. Además que desde el trabajo público o privado que desarrolle, pueda contribuir en concreto a la realización de los derechos humanos de las personas, dando un aporte, por ejemplo, al respeto, ante el sistema penal, de los derechos humanos de los niños, del derecho a un medio ambiente sano, etc. También se trata de que sea capaz de realizar investigaciones en este campo.